viernes, 14 de septiembre de 2007

Y otro pasito más ...

Parece mentira. La otrora bestia negra, la engrasada máquina alemana, la poderosa selección teutona, mansa como un corderito, vapuleada, apabullada, ridiculizada por el empuje de España.

Hay que reconocer que hubo momentos de auténtico ridículo. Cuatro posesiones seguidas con los alemanes incapaces de pasar de mediocampo. He de reconocer que no esperaba ni de lejos este resultado, ha superado con creces mis mejores previsiones. Estos chicos van a ser difíciles de parar. Ahora nos esperan Grecia o Eslovenia para jugarnos los cuartos y un pase a la final.

Pau Gasol estuvo casi ausente durante el partido, lo cual es bueno para la selección que necesitaba un poco de desintoxicación de esa dependencia de referente ofensivo y no tan bueno para él, que parece no encajar un mal día. Ahí va mi tironcillo de orejas. Tras ganar de casi treinta puntos, y con un arbitraje en mi opinión imparcial, y eso que no soy objetivo, no me ha gusto la actitud de crítica.

Declaraciones poco oportunas, bastante prepotentes. En definitiva, poco acertadas. Se ve a leguas la táctica de quejarse ahora para que te lo tengan en cuenta y te traten bien mañana. Pero hay que saber disimular mejor, como hacía Pepu Hernández al final del partido, no cargar tintas sabiéndote ganador, no vaya a ser que te den una lección de humildad

No hay comentarios: